La transformación digital es determinante para tu negocio y el ERP es la principal herramienta para alcanzar el éxito
¿QUÉ ES LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL Y CÓMO VA A AFECTAR A TU NEGOCIO?
La transformación digital es un fenómeno que para algunos expertos va a tener en nuestro día a día un mayor peso que las tres revoluciones industriales anteriores. Veamos los aspectos que, bajo nuestro punto de vista, son más determinantes en este fenómeno al que tu empresa ya no es ajena.
1 LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL NO ES UNA IMPLEMENTACIÓN TECNOLÓGICA MÁS.
2 TODAS Y TODOS EN LA EMPRESA DEBEN IMPLICARSE.
El avance tecnológico permite a las empresas aprovechar nuevas herramientas (cloud, big data, internet de las cosas, inteligencia artificial, machine learning, redes sociales ) y sus consecuencias (flexibilidad, movilidad, omnicanalidad), no para mejorar los resultados o procesos de tu compañía sino para crear nuevos modelos de negocio a través de dichas tecnologías. La realidad física y la realidad virtual están sincronizadas por primera vez en la historia.
Hasta ahora la tecnología en las empresas era sólo competencia del Departamento de Informática. Sin embargo no puede haber transformación digital sin la participación de todos los departamentos. CIOs, CFOs y, especialmente los CEOs, no sólo debéis creer en la transformación digital de su empresa sino además abanderar la estrategia de cambio para el resto de la compañía.
3 NO HAY SECTOR AJENO A LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL.
4 LLEGA UN NUEVO COMPETIDOR, LAS EMPRESAS NATIVAS DIGITALES.
Los sectores en los que se da una mayor disrupción debido a la llegada de las tecnologías digitales son la industria —especialmente las tecnológicas—; los servicios financieros y el comercio minorista. De momento están menos afectados aquellos sectores más ligados a los combustibles, el sector primario y las utilities.
A estas empresas, la digitalización les permite ofrecer a sus clientes productos y servicios con el mismo valor añadido, a veces incluso superior, que los de un proveedor tradicional. Esto se consigue mediante la digitalización de productos, servicios y modelos de negocio y sin necesidad de reproducir toda la cadena de valor. ¿Qué pasa con las empresas que tienen un producto físico? Para estas empresas el cambio llega cuando se digitalizan algunas partes de los procesos.
5 ¿CÓMO ESTÁN REACCIONANDO LAS EMPRESAS TRADICIONALES A LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL?
6 SE ACABARON LOS PLANES A AÑOS VISTA, LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL REQUIERE RAPIDEZ.
Las empresas tradicionales cuentan con cuatro estrategias ante el nuevo escenario de transformación digital. Dos son defensivas y dos ofensivas. Las defensivas son cosechar y retirarse. Cosechar consiste en maximizar la ganancias de un negocio en declive ahorrando costes y consolidando operaciones para ser más eficientes. La retirada se produce cuando la posición de la empresa en el mercado está agotada.
Las estrategias ofensivas son la disrupción del negocio y la ocupación. La disrupción se da cuando la empresa tradicional busca soluciones digitales y más ágiles en el propio mercado a través de colaboraciones o compras. La ocupación consiste en desarrollar un plan integral para crear un nuevo espacio y ocuparlo de inmediato, cerrando el paso a competidores más rápidos.
Las compañías tradicionales cuentan, habitualmente, con una marca posicionada, una amplia base de clientes y mayores recursos… Pero también inercias considerables que dificultan los cambios de rumbo. En cambio los competidores nativos digitales disruptivos cuentan con la capacidad de innovar más rápido, con mayor agilidad, debido a una cultura del riesgo y la experimentación. Las compañías tradicionales deben ganar en rapidez, agilidad y capacidad de innovación adaptándose a modelos y metodologías como agile, lean, innovación abierta o el mínimo producto viable. Ya no se puede planificar a años vista.
7 HACIA UN NUEVO MODELO DE GESTIÓN EMPRESARIAL.
8 EL CLIENTE ESTÁ MÁS CERCA, PARA LO BUENO Y PARA LO MALO.
Las empresas están cambiando, eliminando estructura jerárquicas y apostando por la transversalidad de equipos y el trabajo por proyectos. La transformación digital implica una revisión de anteriores modelos. Las herramientas de gestión empresarial que utilizan la empresas deben ser sencillas, adaptables y flexibles. ERPs innovadores, eficiente y globales que den libertad a los empleados quienes, a través de los indicadores correctos, suministren en tiempo real información que permita la correcta toma de decisiones.
La transformación digital está haciendo a las empresas todavía más costumer centric. Porque gracias a las estrategias digitales el consumidor final obtiene el producto y servicio a menor coste; disfruta de una mejor experiencia y se beneficia de formar parte de una plataforma a la que incorpora toda una serie de datos muy valiosos para las empresas. Sin embargo si a ese cliente, —al que llegaremos por múltiples canales— no está satisfecho contará con una gran tribuna pública a la que la empresa debe responder comunicando de forma rápida y transparente.
9 DESAPARECEN LAS FRONTERAS FÍSICAS Y LAS INDUSTRIALES.
10 LOS DATOS EN EL CENTRO DE LA ESTRATEGIA.
Ya no hace falta ser una gran corporación para comercializar productos y servicios por todo el mundo. La transformación digital da a las pymes la oportunidad de competir en un mundo que gracias a la tecnología ha roto barreras y es cada vez más pequeño y global. Del mismo modo, la era digital permite que las innovaciones en componentes o en partes de la cadena de valor pueden transferirse de una industria a otra, como por ejemplo wearables para monitorizar estados de salud o plataformas de venta on-line que venden servicios de alojamiento en la nube.
Más que nunca la transformación digital dotará a las empresas de suficiente información como para anticiparse en la toma de decisiones. Se prevé que en 2020 haya 50 billones de dispositivos conectados a Internet; para interpretar esta información será crítico contar con herramientas eficientes Big Data Analyitics, Machine learning y otras herramientas de Business Intelligence, entre otras.
1 LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL NO ES UNA IMPLEMENTACIÓN TECNOLÓGICA MÁS.
El avance tecnológico permite a las empresas aprovechar nuevas herramientas (cloud, big data, internet de las cosas, inteligencia artificial, machine learning, redes sociales ) y sus consecuencias (flexibilidad, movilidad, omnicanalidad), no para mejorar los resultados o procesos de tu compañía sino para crear nuevos modelos de negocio a través de dichas tecnologías. La realidad física y la realidad virtual están sincronizadas por primera vez en la historia.
2 TODAS Y TODOS EN LA EMPRESA DEBEN IMPLICARSE.
Hasta ahora la tecnología en las empresas era sólo competencia del Departamento de Informática. Sin embargo no puede haber transformación digital sin la participación de todos los departamentos. CIOs, CFOs y, especialmente los CEOs, no sólo debéis creer en la transformación digital de su empresa sino además abanderar la estrategia de cambio para el resto de la compañía.
3 NO HAY SECTOR AJENO A LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL.
Los sectores en los que se da una mayor disrupción debido a la llegada de las tecnologías digitales son la industria —especialmente las tecnológicas—; los servicios financieros y el comercio minorista. De momento están menos afectados aquellos sectores más ligados a los combustibles, el sector primario y las utilities.
4 LLEGA UN NUEVO COMPETIDOR, LAS EMPRESAS NATIVAS DIGITALES.
A estas empresas, la digitalización les permite ofrecer a sus clientes productos y servicios con el mismo valor añadido, a veces incluso superior, que los de un proveedor tradicional. Esto se consigue mediante la digitalización de productos, servicios y modelos de negocio y sin necesidad de reproducir toda la cadena de valor. ¿Qué pasa con las empresas que tienen un producto físico? Para estas empresas el cambio llega cuando se digitalizan algunas partes de los procesos.
5 ¿CÓMO ESTÁN REACCIONANDO LAS EMPRESAS TRADICIONALES A LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL?
Las empresas tradicionales cuentan con cuatro estrategias ante el nuevo escenario de transformación digital. Dos son defensivas y dos ofensivas. Las defensivas son cosechar y retirarse. Cosechar consiste en maximizar la ganancias de un negocio en declive ahorrando costes y consolidando operaciones para ser más eficientes. La retirada se produce cuando la posición de la empresa en el mercado está agotada.
Las estrategias ofensivas son la disrupción del negocio y la ocupación. La disrupción se da cuando la empresa tradicional busca soluciones digitales y más ágiles en el propio mercado a través de colaboraciones o compras. La ocupación consiste en desarrollar un plan integral para crear un nuevo espacio y ocuparlo de inmediato, cerrando el paso a competidores más rápidos.
6 SE ACABARON LOS PLANES A AÑOS VISTA, LA TRANSFORMACIÓN DIGITAL REQUIERE RAPIDEZ.
Las compañías tradicionales cuentan, habitualmente, con una marca posicionada, una amplia base de clientes y mayores recursos… Pero también inercias considerables que dificultan los cambios de rumbo. En cambio los competidores nativos digitales disruptivos cuentan con la capacidad de innovar más rápido, con mayor agilidad, debido a una cultura del riesgo y la experimentación. Las compañías tradicionales deben ganar en rapidez, agilidad y capacidad de innovación adaptándose a modelos y metodologías como agile, lean, innovación abierta o el mínimo producto viable. Ya no se puede planificar a años vista.
7 HACIA UN NUEVO MODELO DE GESTIÓN EMPRESARIAL.
Las empresas están cambiando, eliminando estructura jerárquicas y apostando por la transversalidad de equipos y el trabajo por proyectos. La transformación digital implica una revisión de anteriores modelos. Las herramientas de gestión empresarial que utilizan la empresas deben ser sencillas, adaptables y flexibles. ERPs innovadores, eficiente y globales que den libertad a los empleados quienes, a través de los indicadores correctos, suministren en tiempo real información que permita la correcta toma de decisiones.
8 EL CLIENTE ESTÁ MÁS CERCA, PARA LO BUENO Y PARA LO MALO.
La transformación digital está haciendo a las empresas todavía más costumer centric. Porque gracias a las estrategias digitales el consumidor final obtiene el producto y servicio a menor coste; disfruta de una mejor experiencia y se beneficia de formar parte de una plataforma a la que incorpora toda una serie de datos muy valiosos para las empresas. Sin embargo si a ese cliente, —al que llegaremos por múltiples canales— no está satisfecho contará con una gran tribuna pública a la que la empresa debe responder comunicando de forma rápida y transparente.
9 DESAPARECEN LAS FRONTERAS FÍSICAS Y LAS INDUSTRIALES.
Ya no hace falta ser una gran corporación para comercializar productos y servicios por todo el mundo. La transformación digital da a las pymes la oportunidad de competir en un mundo que gracias a la tecnología ha roto barreras y es cada vez más pequeño y global. Del mismo modo, la era digital permite que las innovaciones en componentes o en partes de la cadena de valor pueden transferirse de una industria a otra, como por ejemplo wearables para monitorizar estados de salud o plataformas de venta on-line que venden servicios de alojamiento en la nube.
10 LOS DATOS EN EL CENTRO DE LA ESTRATEGIA.
Más que nunca la transformación digital dotará a las empresas de suficiente información como para anticiparse en la toma de decisiones. Se prevé que en 2020 haya 50 billones de dispositivos conectados a Internet; para interpretar esta información será crítico contar con herramientas eficientes Big Data Analyitics, Machine learning y otras herramientas de Business Intelligence, entre otras.